Breve Resumen
Este video explora la geometría sagrada, su presencia en la naturaleza y la arquitectura antigua, y su relación con la conciencia y la espiritualidad. Drunvalo Melquisedec explica cómo la geometría sagrada es un lenguaje universal que conecta con la memoria celular y los niveles atómicos, y cómo se manifiesta en fenómenos como los círculos en las cosechas. También aborda la red de conciencia crística alrededor de la Tierra, su finalización en 1989 y su importancia para la evolución de la conciencia humana.
- La geometría sagrada se encuentra en la naturaleza, el arte y la arquitectura antigua.
- Es un lenguaje universal que conecta con la memoria celular y los niveles atómicos.
- La red de conciencia crística es un campo electromagnético alrededor de la Tierra que se completó en 1989.
- Esta red es esencial para la evolución de la conciencia humana y la supervivencia del planeta.
Introducción a la Geometría Sagrada [0:00]
La geometría sagrada se define como un conjunto de formas y patrones geométricos recurrentes en la naturaleza y en sitios considerados sagrados. Se le atribuyen significados simbólicos y esotéricos basados en sus propiedades, con un trasfondo religioso y filosófico. Históricamente, se asocia con los templarios y la masonería, aunque su uso se remonta a civilizaciones antiguas como la India, Grecia, Egipto y la cultura Maya. Algunos hermetistas y ocultistas la utilizan con diversos propósitos, argumentando que estimula ambos hemisferios cerebrales, el derecho (artístico y visoespacial) y el izquierdo (matemático y lógico). Desde Platón y Pitágoras, estas formas se han vinculado a la numerología y energías espirituales, y con herramientas informáticas y neurocientíficas se profundiza en su influencia, como en el caso de los mandalas.
La Geometría Sagrada como Lenguaje Universal [1:58]
Drunvalo Melquisedec describe la geometría sagrada como un lenguaje universal esencial para discutir conceptos como la Ascensión y la inmortalidad, ya que no existen palabras humanas adecuadas para ello. Este lenguaje está presente en la memoria celular, a niveles atómicos, y es fundamental para la comunicación de ideas complejas. Melquisedec menciona que los círculos en las cosechas son una forma elevada de geometría sagrada, creada por seres con un profundo conocimiento de matemáticas y física. Estos círculos comunican mensajes matemáticos complejos, como el tetraedro de estrellas inscrito en una esfera, que representa un campo de energía primordial alrededor del cuerpo humano y la llave a niveles superiores de conciencia.
La Red de Conciencia Crística [5:44]
Melquisedec explica que, tras experimentos en la Atlántida que dañaron el continuo espacio-tiempo, se decidió crear una red de energía de conciencia crística, un campo electromagnético geométrico basado en el dodecaedro, que rodea la Tierra. Esta red fue diseñada como un soporte para la humanidad tras su caída a niveles dimensionales inferiores. Hace unos 13,000 años, se establecieron puntos de red en todo el mundo, conectados a un punto específico en Egipto, donde se creó un agujero alineado con el eje de la red. A lo largo de los siglos, diversas culturas construyeron templos en estos puntos, reconstruyendo lo que ya existía en otro nivel dimensional. Actualmente, existen 83,000 sitios sagrados interconectados por espirales logarítmicas y de Fibonacci, todos alineados matemáticamente hacia Egipto y otro punto en el Polo Sur.
La Finalización de la Red y su Significado [9:03]
La red de conciencia crística se completó el 4 de febrero de 1989, gracias al esfuerzo de muchas personas a lo largo de los siglos, quienes realizaron acciones como construir edificios, entonar cantos y mover cristales en puntos específicos del planeta. La finalización de esta red es crucial, ya que sin ella, el nivel de conciencia actual se autodestruiría. Esta red es un requisito para que la conciencia pueda evolucionar. Los gobiernos han sido conscientes de la existencia de redes energéticas alrededor del planeta, y han ubicado instalaciones militares en sus nodos. Rusia fue la primera en darse cuenta de la red de conciencia crística. Cada especie en la Tierra tiene su propia red geométrica que cubre el planeta, extendiéndose unos 20 metros en la superficie y 97 kilómetros por encima de ella, apareciendo como un destello azul desde el espacio.
