Breve Resumen
El video examina la controversia de siglos sobre la autenticidad del Santo Sudario de Turín y su posible conexión con Jesús. Se presentan nuevos estudios que sugieren que la tela tiene unos 2,000 años de antigüedad, coincidiendo con la época de Jesús. Además, se discuten las características de la imagen en la tela, los estudios científicos realizados y su posible relación con el Sudario de Oviedo.
- Nuevos estudios sugieren que el Sudario de Turín data de la época de Jesús.
- La imagen en la tela muestra signos de crucifixión y tortura.
- El Sudario de Oviedo podría haber estado en contacto con el mismo cuerpo que el Sudario de Turín.
El Debate Sobre el Santo Sudario de Turín [0:19]
Investigadores italianos han reavivado el debate sobre si el Santo Sudario de Turín tiene huellas del cuerpo de Jesús. Los nuevos estudios sugieren que la tela funeraria que muestra la huella de Jesús es real. La Sábana Santa de Turín, un trozo de lino con la imagen de un hombre con barba y pelo largo, ha sido objeto de controversia durante siglos. Los creyentes creen que Jesús fue envuelto en ella antes de ser enterrado, mientras que otros lo consideran un engaño. Las nuevas conclusiones científicas afirman que la tela fue hecha hace unos 2,000 años, el mismo período en el que se dice que vivió y murió Jesús.
Nuevas Conclusiones Científicas [0:57]
Investigadores italianos utilizaron tecnología especializada de rayos X para examinar la sábana de lino y obtener datos que permitieran determinar su verdad. Analizaron ocho pequeñas muestras de tela para descubrir detalles de la estructura del lino y los patrones de celulosa, utilizando métricas de envejecimiento específicas como la temperatura y la humedad. En 1988, otras investigaciones afirmaron que la tela pertenecía a la Edad Media, pero el autor principal del último estudio explicó que la datación por carbono utilizada para estimar que la sábana Santa fue hecha entre los años 1260 y 1390 no era confiable, ya que las muestras de tela suelen estar sujetas a contaminación.
La Imagen en la Tela del Sudario [2:03]
En la tela del sudario se observa la imagen de un hombre de 1.80 metros con las heridas de una crucifixión. Entre los signos que se pueden percibir están las heridas causadas por un casco de espinos en la cabeza, latigazos por todo el cuerpo y marcas de clavos en las muñecas y los pies. Se menciona que todo lo relacionado con el verdadero Jesús es ocultado por los controladores, quienes muestran lo que quieren para crear confusión y que la gente no sepa quién era realmente.
Análisis Científico de la Sábana de Turín [3:25]
La Sábana Santa de Turín, también conocida como la Síndone de Turín, es una tela de lino que muestra la imagen en negativo fotográfico de un hombre con marcas y traumatismos físicos propios de una crucifixión. Es consistente con el lienzo o sábana de la cual hablan los evangelios, la sábana nueva y limpia en la cual José de Arimatea envolvió el cuerpo de Jesús tras su muerte en la cruz. La sábana mide 4.41 metros de largo y 1.13 metros de ancho, y se encuentra en la catedral de San Juan Bautista de Turín en Italia. Los detalles de las torturas que se observan en el lienzo evocan las narraciones de los evangelios, como las señales de los clavos en manos y pies, la corona de espinas alrededor de la cabeza, las señales de los azotes, una herida en el costado y la ausencia de fractura de huesos de las piernas.
Características de la Imagen en la Síndone [5:07]
La imagen en la Síndone consiste en una débil mancha amarillenta difícil de ver a menos de 2 metros de distancia. Reproduce una vista doble frontal y dorsal de un cuerpo humano desnudo cubierto de heridas que han dejado manchas de sangre en el lienzo por contacto directo. La imagen no muestra ni la parte superior de la cabeza ni los costados. La figura humana, especialmente el rostro, es de gran precisión anatómica sin distorsiones. Hay una perfecta correspondencia entre ambas caras de la imagen, indicando claramente que fue un cuerpo tridimensional el que estuvo envuelto en el lienzo. Las manchas en la tela tienen el carácter de un negativo fotográfico.
Detalles Adicionales Revelados por la Imagen [5:58]
A diferencia de una fotografía, hay una correspondencia entre la intensidad de la imagen y la distancia lógica entre un lienzo y un cuerpo cubierto por él. Una función matemática sencilla permite recuperar la tridimensionalidad. Detalles del orden de milímetros pueden observarse con técnicas de realce y de contraste, especialmente en el caso de monedas sobre los párpados del hombre de la síndone. No hay pigmento alguno a un bajo examen microscópico, ni en la superficie de las fibras del lino ni en su interior. Tampoco hay fluorescencia que indique la existencia de sustancias extrañas en el lienzo. En las zonas de la imagen no hay imagen bajo las costras de sangre, lo que indica que la imagen es posterior a ellas.
Itinerario Histórico de la Sábana Santa [7:16]
Juan vio las vendas en el suelo, pero no entró. Simón Pedro entró y vio las vendas en el suelo y el sudario que cubrió su cabeza no junto a las vendas, sino plegado en un lugar aparte. Hay entonces dos sudarios: el grande que cubría el cuerpo, la síndone, y otro que se puso sobre este en el área de la cabeza, que se encuentra en la catedral de Oviedo. Los apóstoles tomaron esta reliquia con inmenso amor para mostrarla como la primera prueba de la resurrección. Hay dos teorías sobre su itinerario: una que fueron los templarios quienes la guardaron secretamente, y otra que pasó por Grecia y luego a Francia.
Traslado y Conservación de la Sábana Santa [8:38]
En 1453, la sábana Santa fue cedida al ducado de Saboya en Chambery, Francia. En 1506, el Papa otorgó a la sábana Santa una fiesta especial, aprobando una liturgia para la santa misa y el oficio divino. En 1532, sufrió un incendio que le dejó marcas permanentes, pero milagrosamente no se llegó a perder. Las hermanas clarisas pusieron parches en las quemaduras en 1534. Los Saboya trasladaron su capital a Turín en 1578 y llevaron allí la sábana Santa. Desde 1694, es custodiada en la capilla que Guarino Guarini construyó entre la catedral y el Palacio real de Turín.
Estudios Científicos y Autenticidad de la Síndone [10:32]
En 1898, se tomó la primera fotografía por el abogado Seco Pía, y desde 1983 la sábana Santa es propiedad de la Santa Sede. Los enemigos de Jesús han tratado de desacreditar la autenticidad de la sábana con mentiras, como que la sangre no es más que pintura medieval o que el rostro de Cristo está inspirado en las pinturas góticas. Se descubrió una fina película de bacterias que cubre todo el lienzo, distorsionando los resultados de la datación con el carbono 14.
Evidencia que Demuestra la Autenticidad [11:31]
En 1898, al hacer las primeras fotografías de la sábana Santa, Seco Pía tuvo una gran sorpresa al ver que la imagen en negativo aparecía majestuosamente como una imagen en positivo con extraordinaria claridad y detalle. Expertos de la NASA en 1977 descubrieron que la imagen tiene propiedades tridimensionales que no pertenecen ni a las pinturas ni a las fotografías. En 1978, la iglesia permitió a un equipo internacional de científicos investigar el lienzo, y los análisis fueron extensos, envolviendo diversos métodos desde rayos X hasta análisis químicos.
Resultados de los Estudios Científicos [12:42]
Los estudios del tejido sitúan su procedencia en el área sirio-palestina en el siglo I. En 1978, se comprobó la existencia de polen de flores de Palestina y se encontraron aloe y mirra, como los que utilizaban en el Medio Oriente los judíos para preparar a los cadáveres. Se han descubierto rastros de flores por todo el cuerpo, identificando hasta 25 variedades que florecían en abril de aquella época, una de las plantas solo crece cerca de Jerusalén. Se han descubierto 58 tipos de pólenes, identificando cada planta mediante técnicas avanzadas, y 28 de esos tipos de polen solo existen en Oriente Medio.
Más Evidencia Científica [14:15]
Sobre los ojos hay huellas de monedas acuñadas en el año 29 d.C. bajo Poncio Pilato, lo cual corresponde a la costumbre de la época de Jesús de poner las monedas para mantener los párpados cerrados. Los análisis de las huellas de sangre hechos en 1978 han indicado la presencia de sangre humana del tipo AB, coincidentemente en su mayoría del pueblo hebreo. La sangre es de un hombre que padeció una muerte traumática, y tanto los análisis químicos como la fluorescencia amarillo verdosa visible bajo luz fluorescente indican la presencia de flujos de sangre.
Características Únicas de la Imagen [15:37]
No existen indicios del uso de brochas en la imagen, y no se utilizó ninguno de los métodos artísticos conocidos para hacer la imagen. La imagen tiene solo una fibra de profundidad. Se comprobó la absoluta ausencia de pigmentos, tintas u otros medios de pintura en la sábana Santa. No hay imagen del cuerpo bajo las manchas de sangre, por lo tanto, la imagen se formó después de las manchas de sangre. La imagen del cuerpo del hombre de la sábana no está hecha manualmente, no es una pintura ni una quemadura.
Análisis Médico de las Heridas [16:37]
Desde el campo de la medicina, la imagen que aparece en negativo permite un minucioso estudio anatómico y de las diferentes heridas que aparecen en el cuerpo. El primer cirujano que comprobó la absoluta exactitud anatómica de esas heridas fue el profesor de anatomía comparada de la Sorbona, Yves Delage, quien no era creyente. Una multitud de médicos han podido confirmar los hallazgos del doctor Delage, afirmando que la representación de las heridas es anatómicamente perfecta y con detalles desconocidos en la Edad Media.
Contradicciones con la Iconografía Medieval [17:57]
La sábana de Turín revela datos desconocidos en tiempos medievales. En el siglo XIV, la iconografía tenía un ínfimo desarrollo del realismo anatómico, y todas las imágenes de la época demuestran que se desconocían los elementos históricos y arqueológicos sobre la flagelación y la crucifixión según se hacía en el siglo I. La sábana Santa no sigue la iconografía medieval, sino que muestra estos elementos con suma precisión, como que Cristo no cargó con toda la cruz sino solo con el madero horizontal, y que no lo clavaron por las palmas de las manos sino por las muñecas.
Imposibilidad de Falsificación Medieval [19:04]
En caso de que la sábana Santa fuera medieval, se requeriría que se martirizara a una víctima, sometiéndola en vida a 700 heridas y traspasando el corazón con una lanza. Además, la víctima tendría un rostro perfectamente afín con los iconos de Cristo difundidos en el arte bizantino desde el siglo VI. El tejido del lienzo envolvió un auténtico cadáver durante un período de 30 a 36 horas, como lo demuestran las 700 heridas pequeñas y grandes calcadas sobre el lino por contacto.
El Enigma de la Formación de la Imagen [20:29]
Será necesario acudir a fenómenos desconocidos no reproducibles a voluntad en los cuales el cadáver tiene un efecto directo sobre el lienzo por algún tipo de radiación corpuscular o electromagnética actuando sin contacto. La radiación sobrenatural del momento de la resurrección puede ser la causa misteriosa de la impresión de la imagen del cuerpo en el lienzo. Esa imagen es tridimensional, inimaginable si fuera una falsificación.
Teorías Científicas Sobre la Imagen [22:31]
Giulio Fanti, profesor de medidas mecánicas y térmicas de la Universidad de Padua, ha desarrollado una investigación sobre la sábana. Ha dicho que ninguna de las hipótesis puede explicar completamente la misteriosa imagen, y ninguna de las reproducciones logra ofrecer características semejantes a las de la tela sindónica. Los experimentos que Fanti llevó a cabo exigieron tensiones eléctricas de alrededor de 500,000 voltios para obtener imágenes semejantes y de pocos centímetros de extensión.
El Estudio de la ENEA y la Radiación Uva [24:25]
El estudio de la ENEA trató de conocer los procesos físicos y químicos que pueden generar una coloración similar a la de la imagen de la sábana Santa. Una de las hipótesis fue la de una forma de energía electromagnética, por ejemplo, un destello de luz de poca longitud de onda que podría tener los requisitos adecuados para reproducir las principales características de la imagen de la sábana Santa. Los resultados demuestran que un breve e intenso destello de radiaciones uva direccionales puede colorear un tejido en modo de reproducir muchas de las peculiares características de la imagen del cuerpo de la sábana Santa de Turín.
El Santo Sudario de Oviedo [26:39]
Existen varias reliquias que prueban la existencia del Jesús histórico, y una de ellas es el Santo Sudario de Oviedo, conocido también por pañolón de Oviedo o sudarium domini. Se trata de un pañuelo de lino con varias manchas de forma rectangular con unas medidas de 85 cm de largo por 52 cm de ancho. Se la venera como una prenda funeraria de Jesús de Nazaret mencionada en el Evangelio de San Juan.
Historia y Tradiciones del Sudario de Oviedo [27:27]
La primera referencia de un sudario venerado como reliquia proviene de un peregrino anónimo de Placencia hacia el año 570. El primer documento que habla específicamente del sudario de Oviedo está fechado el 14 de marzo de 1075 y describe la apertura solemne del arca Santa conteniendo 30 reliquias, entre ellas el sudario de Oviedo. Según este documento, las reliquias fueron depositadas en el arca del siglo VII en Toledo con el fin de ponerlas a salvo del avance islámico.
Relatos Históricos del Arca Santa [29:42]
Una carta de Osmundo de Astorga de entre el 1082 y el 1096 habla de una tradición según la cual siete hombres llegaron desde Jerusalén hasta España llevando las reliquias a Toledo y luego a Astorga y a Oviedo. El obispo Pelayo indica que durante el reinado del bisigodo Sisebuto, una caja llena de reliquias fabricada por algunos discípulos de los Apóstoles fue llevada a África y luego a Toledo, donde habría permanecido hasta la invasión musulmana.
Leyendas y Traslados del Arca Santa [31:31]
Entre los siglos XII y XIII circuló una leyenda que decía que el arca había sido construida en Jerusalén y luego arrojada al mar en el puerto de Jaffa. Para salvarla de los paganos, fue llevada a Toledo y después transportada a la cima de una montaña cerca de Oviedo. El rey Alfonso I habría añadido al arca las reliquias de los santos Julián y Serrano y otras de distintas localidades de España.
Relación con la Sábana Santa y Estudios Científicos [33:24]
Uno de los estudiosos del paño fue el obispo Julio Richi, quien afirmó que cuando contempló el paño por primera vez se convenció de su autenticidad al reconocer la semejanza con el sudario de Turín. En 1977, obtuvo el permiso para tomar algunos fragmentos del tejido del sudario que envió a Max Frey Sulzer para un examen de los pólenes. En 1982, se encontró sangre humana del tipo A en la sábana Santa de Turín, y en 1990-2007, cuatro exámenes dataron el origen del tejido del sudario de Oviedo en un intervalo entre los siglos VI y IX.
Análisis Comparativo y Conclusiones [35:50]
Mark Guscin investigó la relación entre el santo sudario de Oviedo y la sábana Santa de Turín, concluyendo que ambas prendas cubrieron la misma cabeza en dos momentos distintos pero próximos entre sí. Abin Noam Danin coincidió con este análisis, añadiendo que los granos de polen del pañolón coinciden con los de la sábana Santa. En el estudio realizado por el EDES se encontraron restos de pólvora provenientes de la voladura de la cámara Santa en 1934. Los hilos del sudario, al igual que los hilos de la sábana Santa de Turín, están torsionados en Z.