Breve Resumen
Este video introduce una serie sobre el culto del primer templo hebreo, contrastándolo con las creencias del segundo templo influenciado por el exilio. Se explora la teología del primer templo, enfocada en un pacto cósmico y la expiación del pecado para mantener la pureza de la creación, en contraposición a la visión más terrenal y nacionalista del segundo templo.
- El culto del primer templo veía la creación como un pacto eterno, mientras que el segundo templo se centraba en la posesión de la tierra.
- La expiación del pecado en el primer templo buscaba purificar la creación corrompida por ángeles caídos, a diferencia del enfoque en la nación de Israel del segundo templo.
- El ritual de expiación en el primer templo involucraba al rey como sumo sacerdote, transformándose en Yahvé para purificar la creación, un concepto rechazado por el segundo templo.
Introducción a la Serie y Perspectiva del Primer Templo [0:01]
El video marca el inicio de una nueva serie que examina el culto del primer templo de los hebreos, sus creencias y su eventual desaparición. A diferencia de una serie anterior que abordó el tema desde la perspectiva de los judíos del exilio y el segundo templo, esta serie se enfoca en el punto de vista de los antiguos hebreos del primer templo. Se explorará el misterio de sus creencias, cómo defendieron su teología y la estrategia que utilizaron para refutar a los del exilio y el segundo templo, siendo el libro de Enoc una pieza clave en este análisis.
Teología del Primer Templo: Un Pacto Cósmico [1:46]
Se presenta un breve repaso de las creencias del antiguo culto de Israel, contrastándolas con las del segundo templo. La teología del primer templo tenía connotaciones cósmicas, como se evidencia en la importancia dada al sábado como conmemoración de la creación. En contraste, el Deuteronomio reduce el sábado a un recordatorio de la salida de Egipto, evidenciando una diferencia clave en las creencias teológicas. Los antiguos hebreos veían la creación como un pacto eterno, mientras que el segundo templo buscaba reemplazar esta visión con una historia centrada en la posesión de la tierra.
El Origen del Mal y la Corrupción de la Creación [4:26]
El video explica que, para los antiguos hebreos, el origen del mal no se encuentra en la historia de Adán y Eva, sino en la corrupción de la creación por ángeles malignos que impartieron conocimiento corrupto a los seres humanos. Esta corrupción afectó a toda la creación, como se describe en el libro de Isaías. En contraste, los del segundo templo veían la caída en pecado como la pérdida de la nación terrenal de Israel, reduciendo la teología pactual a una disputa de bienes raíces. Los deuteronomistas editaron las escrituras para favorecer su narrativa, presentando al antiguo culto como los villanos de la historia.
El Pacto Eterno y su Vínculo con la Creación [6:58]
Se destaca el pacto cósmico y eterno que los del primer templo tenían con Dios, ejemplificado en Jeremías 31:35-36, donde se vinculan las leyes de los cuerpos celestes con las leyes de Israel. Si Israel falla, la creación falla. El libro de Enoc confirma este pacto eterno, donde el cielo, la tierra, el mar, el sol, la luna y las estrellas cumplen su función gracias a este juramento. La creación fue corrompida por ángeles corruptos que buscaban destruir los sellos que mantenían la creación unida, pero no podían descifrar el nombre secreto que funcionaba como la llave de estos sellos, el cual se encontraba en el Santísimo.
El Rol del Sumo Sacerdote y los Reyes Divinos [11:19]
Se explica que en el Santísimo, el sumo sacerdote ofrecía el sacrificio expiatorio por toda la creación, mencionando el nombre secreto que mantenía el pacto de la creación intacto. Este lugar representaba el origen de la creación y la existencia de Jehová. Los reyes divinos, hombres que caminaban en la tierra pero también eran dioses, tenían el rol principal de asegurar la fertilidad de la tierra. Salomón es presentado como un ejemplo de estos reyes, vinculados con el sol y su poder de acabar con las fuerzas del mal.
Rituales de Renovación y la Expiación del Pecado [17:02]
Se describe cómo los rituales de renovación incluían un viaje del rey al templo, donde ascendía a los cielos y recibía información sobre el futuro y el pacto entre Dios y la nación. Este ritual fue reemplazado por la historia de Moisés en el Monte Sinaí. Los reyes divinos, además de proveer fertilidad, poseían conocimiento divino angelical. En estos rituales, el rey divino copulaba con una sacerdotisa, representando la fertilidad sobre la tierra. El Día de las Expiaciones (Yom Kipur) se celebraba de manera distinta, donde el rey se transformaba en Yahvé en el Santísimo.
El Templo como Representación de la Creación [23:00]
Se explica que el templo de Jerusalén era la creación misma, construido sobre el monte Moria, donde comenzó la creación. La piedra angular tapaba los pozos de las aguas caóticas. La historia de David rompiendo la piedra angular y causando una inundación simboliza cómo Yahvé triunfa sobre las aguas caóticas. El pacto eterno selló las aguas caóticas debajo de la piedra angular, como se ve en la historia del Arca de Noé. Cuando Israel rompía el pacto, el sumo sacerdote debía expiar al pueblo y a la creación.
La Expiación del Pecado en el Primer Templo [27:33]
El ritual más importante era la expiación del pecado por la creación (Yom Kipur), donde el rey, como sumo sacerdote, hacía expiación por los pecados de la nación. Esta idea fue rechazada por el segundo templo, como se evidencia en el libro de Éxodo. El nuevo ritual de la Pascua permitía a todas las familias apaciguar la ira de Jehová a través del sacrificio. En el sacrificio de la expiación, el rey sacerdote era humillado, simbolizando la batalla de Jehová contra el caos.
El Ritual de Expiación y sus Simbolismos [31:02]
Durante el ritual de expiación, el rey sacerdote era despojado de su ropa, representando las fuerzas de la naturaleza en su peor estado. Los sacrificios se hacían para purificar la creación. En el antiguo ritual de Purificación de sagm en Babilonia, el rey sacerdote era reemplazado, mientras que en Israel se escogían dos machos cabríos: uno se sacrificaba en reemplazo de Jehová, y el otro representaba al ángel de la muerte, Azazel. Este ritual fue cambiado en el segundo templo, pero los cristianos lo celebran en la Santa Cena.
La Resurrección y el Mesías Divino [34:30]
En el primer templo, la resurrección era una transformación de lo físico a lo espiritual, como se ve en el libro de Enoc. El sumo sacerdote se transformaba al convertirse en rey sacerdote, ascendiendo al plano espiritual. Esta expiación debía hacerse anualmente, lo que llevó a la era de los movimientos mesiánicos, donde se buscaba una expiación final hecha por el mismo Dios. Sin embargo, el gran Mesías divino (Melquisedec) nunca llegó, y las creencias del primer templo fueron corrompidas y reemplazadas.
El Declive del Primer Templo y el Ascenso del Libro de Enoc [37:07]
La destrucción del templo por un pueblo invasor debilitó la confianza en las creencias del primer templo, abriendo la puerta a una nueva teología centrada en la posesión de la tierra. Mientras la reforma deuterocanónica comenzaba, los adeptos a las costumbres antiguas escribían el libro de Enoc, un arma letal contra la religión del segundo templo, que será el tema de la próxima parte de la serie.