Breve Resumen
El video relata la experiencia cercana a la muerte (ECM) de Mellen-Thomas Benedict, quien, tras ser diagnosticado con cáncer terminal, experimentó una profunda transformación de su percepción sobre la vida, la muerte, el universo y la conexión entre todos los seres. Durante su ECM, interactuó con una luz que se manifestó en diversas formas arquetípicas, recibió revelaciones sobre la naturaleza del alma humana y la importancia del amor, exploró el universo y el vacío pre-creacional, y finalmente regresó a su cuerpo, curándose milagrosamente del cáncer.
- La luz se adapta a las creencias individuales.
- El amor es la fuerza que sostiene a la humanidad.
- Cada persona tiene el poder de salvarse, redimirse y curarse a sí misma.
- El universo está lleno de vida y consciencia.
- El vacío es la fuente de toda creación.
La enfermedad y el inicio de la experiencia [0:18]
Mellen-Thomas Benedict, residente en California, en la década de 1970, desarrolló una profunda preocupación por la contaminación y llegó a considerar a los humanos como un cáncer para la Tierra. A principios de la siguiente década, fue diagnosticado con cáncer cerebral terminal, lo que le hizo sentir que se había convertido en aquello que tanto criticaba. Los médicos le dieron ocho meses de vida, considerando su caso inoperable y desaconsejando la quimioterapia.
El despertar y la salida del cuerpo [1:19]
Una mañana, Benedict se despertó con la certeza de que sería su último día. De repente, se encontró consciente y de pie, fuera de su cuerpo, experimentando una realidad más vívida que la ordinaria. Podía ver cada rincón de su casa y sus alrededores. En ese estado, vio una luz brillante y sintió un impulso irresistible de acercarse a ella, intuyendo que al hacerlo moriría.
Encuentro con la luz y revelaciones [2:04]
Al acercarse a la luz, Benedict pidió un momento para reflexionar antes de partir. Para su sorpresa, la experiencia se detuvo y pudo comunicarse con la luz, que se transformó en diversas figuras arquetípicas. La luz le reveló que se manifestaba de acuerdo con las creencias de cada individuo y que era la matriz del yo superior. También comprendió que todos estamos conectados a través de nuestros yo superiores.
El Mandala de almas humanas y la naturaleza del alma [3:25]
La luz se transformó en un Mandala de almas humanas, lo que cambió radicalmente la opinión de Benedict sobre la humanidad, dándose cuenta de su belleza intrínseca. Aprendió que ninguna alma es intrínsecamente mala, sino que las experiencias negativas pueden llevar a las personas a hacer cosas malas. La luz le reveló que el amor es lo que sostiene a los seres humanos y que la falta de amor es lo que los desvía.
El mensaje de la luz: Salvación, redención y curación [4:26]
Benedict preguntó si la humanidad sería salvada. La luz respondió con un mensaje contundente: cada individuo tiene el poder de salvarse, redimirse y curarse a sí mismo, un poder inherente desde el principio de los tiempos.
Exploración del universo y el río de la vida [4:51]
Benedict fue absorbido por la luz y transportado a otra dimensión, donde encontró una luz aún más brillante, el río de la vida. Fue invitado a beber de ella, experimentando un éxtasis profundo. A continuación, fue impulsado al espacio, atravesando el centro de la galaxia, donde adquirió nuevos conocimientos sobre el universo y la existencia de vida en otros mundos.
Expansión de la consciencia y el vacío pre-creacional [6:18]
Una segunda luz le permitió acceder a un nuevo nivel de verdad, experimentando una calma profunda y la percepción del infinito. Viajó al vacío pre-creacional, antes del Big Bang, sintiendo la primera vibración de la creación. Comprendió que el Big Bang es solo uno de un número infinito de Big Bangs que crean universos simultáneamente. El vacío es la fuente de todas las posibilidades y la consciencia absoluta, presente dentro y fuera de todas las cosas.
El regreso a la vida y la curación [8:59]
Mientras tanto, en el hospital, la cuidadora de Benedict lo daba por muerto. Sin embargo, después de una hora y media, volvió a la vida. Al despertar, el mundo le parecía un sueño comparado con la realidad que había experimentado. Con el tiempo, fue asimilando su experiencia y sintiéndose mejor. Tres meses después, los exámenes médicos revelaron que ya no tenía cáncer.
