Resumen Breve
Este video explica los ocho pasos de Kotter para implementar un cambio exitoso en una organización. Estos pasos incluyen:
- Establecer un sentido de urgencia.
- Formar una coalición.
- Crear una visión clara.
- Comunicar la visión.
- Eliminar obstáculos.
- Asegurar triunfos a corto plazo.
- Mantener la inercia.
- Institucionalizar el cambio.
Establecer un sentido de urgencia
Para iniciar un cambio organizacional, es crucial despertar el interés creando un sentido de urgencia. Esto se logra presentando tendencias del mercado, datos confiables y riesgos potenciales que enfrenta la organización. Según Kotter, se necesita el apoyo de al menos tres de cada cuatro patrocinadores dentro de la organización para tener una posibilidad de éxito. Este proceso implica superar el escepticismo y convencer a las partes interesadas de la necesidad del cambio.
Formar una coalición
El segundo paso implica formar una coalición de personas influyentes dentro de la empresa que apoyen el cambio. Este grupo debe representar a todas las áreas importantes del negocio y estar comprometido emocionalmente con la visión del cambio. No se trata solo de gestionar el cambio, sino de liderarlo activamente, obteniendo el respaldo de figuras clave dentro de la organización.
Crear una visión Clara de cambio
Es fundamental crear una visión clara y comprensible del cambio que se busca implementar. Esta visión debe destacar los beneficios del cambio de manera que sean fáciles de entender para todos. Para crear esta visión, es importante centrarse en los valores fundamentales necesarios para el cambio, cómo será el futuro de la empresa después del cambio y desarrollar una estrategia fácil de comunicar a diferentes audiencias.
Comunicar la visión
La comunicación efectiva de la visión es determinante para el éxito del cambio. Es importante asegurarse de que la visión no se vea opacada por otras novedades dentro de la empresa. La visión debe integrarse en todas las comunicaciones internas posibles y los líderes deben ser embajadores del cambio, demostrando su adopción en su día a día y respondiendo abiertamente a las dudas.
Eliminar los obstáculos
A pesar de que el cambio esté en discusión, puede haber resistencia dentro de la organización. Es necesario sumar más personas al equipo de cambio y reconocer y premiar a aquellos que ya están adoptando el cambio. También se deben identificar a las personas que aún no apoyan el cambio y ayudarlas a comprender los beneficios.
Triunfos a corto plazo
El éxito es un gran motivador, por lo que es importante mostrar resultados palpables de la implementación del cambio a través de metas a corto plazo. Se deben buscar proyectos con éxito asegurado que no requieran la participación de personas o grupos críticos. Es crucial reconocer el esfuerzo de aquellos que apoyan el cambio y hacen posible avanzar hacia la visión.
Mantener la inercia
No se debe declarar la victoria antes de tiempo, ya que solo se han ganado pequeñas batallas. Es necesario seguir creciendo con proyectos de mayor envergadura y valor para la empresa, mejorando continuamente el proceso. En este paso, se debe realizar un análisis profundo de lo que está funcionando y lo que no, abrazando el concepto de la mejora continua.
Institucionalizar el cambio
El último paso es institucionalizar el cambio, integrándolo en la cultura de la organización. Los valores que se fijaron para la visión del cambio deben ser visibles día a día. Se deben seguir mencionando los éxitos, recordando a aquellos que apoyaron inicialmente el cambio y manteniendo un equipo de trabajo que siga apoyando la implementación operativa del cambio a largo plazo.