Breve Resumen
Este video de Myriam Graciela Rocholl explica en detalle la anatomía y fisiología del intestino grueso, incluyendo sus diferentes secciones, la función de la flora intestinal, el proceso de absorción de agua, la composición de las heces y el mecanismo de la defecación.
- El intestino grueso se divide en ciego, colon ascendente, transverso, descendente, sigmoide, recto y canal anal.
- La flora intestinal juega un papel crucial en la digestión y la producción de vitaminas.
- El intestino grueso absorbe agua y electrolitos, formando las heces.
- La defecación es un proceso reflejo que puede ser controlado voluntariamente.
Anatomía del Intestino Grueso [0:06]
El intestino grueso, con un diámetro mayor al del intestino delgado (aproximadamente 6.5 cm) y una longitud de 1.5 metros en cadáveres, se divide en varias regiones. Comienza con el ciego, un saco ciego debajo de la válvula ileocecal, del cual se origina el apéndice vermiforme. El colon, que incluye el ascendente, transverso (con las flexuras hepática y esplénica), descendente y sigmoide, continúa el recorrido. El recto, de unos 15 cm de longitud, presenta tres pliegues transversales conocidos como válvulas rectales, que ayudan a controlar la salida de gases sin la materia fecal. Finalmente, el canal anal mide aproximadamente 3 cm. La superficie externa del colon presenta abolladuras llamadas haustras, formadas por la contracción de las tenias cólicas, bandas longitudinales de músculo. También se observan depósitos de grasa llamados apéndices epiplóicos.
Estructura del Recto y el Canal Anal [4:12]
El recto, con sus 15 centímetros de longitud, se caracteriza por tener tres pliegues transversales conocidos como válvulas rectales, cuya función es impedir que la materia fecal salga junto con los gases. El conducto anal atraviesa el músculo elevador del ano y se abre en el orificio anal. En el conducto anal se encuentran columnas anales longitudinales y depresiones conocidas como senos anales. Cuando la materia fecal pasa por los senos, estos se comprimen y agregan mucosidad. El esfínter anal interno es de músculo liso, mientras que el esfínter anal externo es de músculo esquelético.
Histología del Intestino Grueso [6:09]
La mucosa del colon está formada por un epitelio cilíndrico simple con células absortivas que tienen microvellosidades. A diferencia del intestino delgado, no presenta pliegues ni vellosidades intestinales, pero sí criptas de Lieberkühn profundas con abundantes células caliciformes que producen un moco alcalino rico en bicarbonato. Este moco facilita el deslizamiento del bolo fecal. La capa muscular interna es continua, mientras que la externa es discontinua y se concentra en las tenias cólicas, excepto en el recto y el canal anal, donde es continua. En la última porción del canal anal, el epitelio se vuelve plano estratificado para resistir la abrasión mecánica de las heces.
Flora Intestinal y Absorción [7:52]
En el intestino grueso, la absorción de nutrientes es limitada, aunque se puede absorber algo de glucosa producida por la flora intestinal. Esta flora, compuesta por más de 800 especies de bacterias, establece una relación simbiótica con el organismo humano. Las bacterias descomponen alimentos no digeribles, como la celulosa y la pectina, y producen vitaminas esenciales, especialmente la vitamina K, crucial para la coagulación sanguínea. El intestino grueso se protege de esta flora mediante nódulos linfáticos que contienen células del sistema inmunológico.
Motilidad Intestinal y Absorción de Agua [10:43]
El paso del contenido del íleon al ciego está regulado por la válvula ileocecal. Los movimientos peristálticos del íleon distal relajan el esfínter ileocecal, permitiendo el paso del contenido al ciego. La distensión del ciego provoca un reflejo que contrae el esfínter, deteniendo el flujo. El avance del contenido a través del intestino grueso se realiza mediante contracciones de segmentación que mezclan las secreciones mucosas con el bolo fecal. El colon ascendente y la primera mitad del colon transverso son responsables de la absorción de la mayor parte del agua (aproximadamente 900 ml). Este proceso se realiza mediante el transporte activo de sodio hacia los capilares sanguíneos, seguido por el arrastre osmótico de agua.
Movimientos en Masa y Defecación [14:00]
La mitad izquierda del colon transverso y el colon descendente actúan como colon de depósito. Una o dos veces al día, se producen movimientos peristálticos en masa que impulsan el bolo fecal hacia el recto. Estos movimientos pueden ser estimulados por la ingesta de alimentos, especialmente después del desayuno. La acumulación de materia fecal en el recto distiende sus paredes, generando el deseo de defecar.
Composición de la Materia Fecal y Gases [15:32]
La materia fecal está compuesta por agua, bacterias muertas, grasas, proteínas no digeridas, materia inorgánica y células desprendidas del epitelio intestinal. Las bacterias de la flora intestinal, junto con el jugo biliar, son responsables del color de las heces, transformando la biliverdina en estercobilina. La falta de coloración puede indicar una obstrucción biliar. Las bacterias también producen gases como sulfuro de hidrógeno, metano, dióxido de carbono, hidrógeno y nitrógeno. El sulfuro de hidrógeno y las aminas (indol y escatol) son responsables del olor característico de las heces.
Reflejo de la Defecación [20:34]
El reflejo de la defecación se inicia cuando el bolo fecal distiende el recto, enviando señales a la médula espinal. La médula responde con impulsos parasimpáticos que contraen el recto y el canal anal, y relajan el esfínter anal interno. En niños, este proceso resulta en la defecación. En adultos, el control voluntario del esfínter anal externo permite inhibir o permitir la defecación. La contracción voluntaria del esfínter anal externo puede suprimir temporalmente el deseo de defecar hasta que nuevas contracciones en masa lo reactiven.